La historia es así: Tony Vincent, uno de los actores principales del elenco, decidió tomarse unos días de licencia y, por tal motivo, su papel de un narcotraficante llamado St Jimmy quedó vacante.
Los productores del espectáculo tuvieron la brillante idea de ofrecerle el papel temporario a Billie Joe Armstrong, el cantante de la banda y cerebro del álbum que los puso definitivamente en la cima.
Después de pensarlo unos días, el frontman accedió a reemplazar por ocho funciones a Vincent. Así, aquellos que tengan la suerte de poder conseguir un ticket para el Teatro St. James, contemplarán las artes histriónicas del músico.
Del martes 28 de septiembre al domingo 3 de octubre, Armstrong se pondrá en la piel de un fracasado que huye de un suburbio para traficar drogas, mientras toca la guitarra esperando que la gran ciudad le otorgue una oportunidad.
