Como en cualquier club con un mínimo de prestigio citadino, en el “Pop City” ubicado en Tampa, Florida, hubo una pelea entre visitantes pasados de tragos. Era la madrugada del 2 de enero cuando la policía irrumpía en el club para investigar un altercado que se había dado unos minutos antes. Al llevarse detenidas a 5 personas, se percataron de una pelea entre una chica y un muchacho rubio, el rubio era Nick Carter, el niño bonito (ahora con problemas de obesidad) de los Backstreet Boys.
La policía separo la pelea y le pidió a Carter que se retirara del lugar, tras pedírselo “10 veces seguidas, le dimos hasta la cuenta de 3 para salir del lugar”. Cuando el conteo finalizó, Nick seguía allí, así que la policía lo esposo y se lo llevo a la comisaría donde paso toda la noche.
Nick afronta ahora un cargo por “Resistencia a la aplicación de la ley sin violencia por parte de un oficial”, calificado como un delito menor y que tiene una pena máxima de un año de cárcel y 500 dolarés de multa. La revisión del caso de Carter ante un juez se hará el próximo 4 de marzo. La chica involucrada en la pelea no fue identificada aún.