La estrella del pop, Michael Jackson, cava él solo su propia tumba, como en la entrevista que será emitida este domingo por la cadena CBS, la cual fue realizada el pasado 24 de diciembre. En ella, Jackson da más pistas sobre su desordenada personalidad.
Al ser consultado por su entrevistador sobre si todavía veía bien dormir con niños, él contesto ‘por supuesto. ¿por qué no? Si eres un pedofílico, si eres Jack el Destripador ó si eres un asesino no es buena idea. Pero yo no lo soy.’
Jackson además comentó sobre el niño que lo demandó la pasada semana y el cual desató de nuevo otro escándalo de abuso sexual realizado por el rey del pop ‘no dormí en la cama con el niño. Incluso si lo hubiese hecho es aceptable. Dormí en el piso. Siempre doy la cama al niño.’
Por otro lado, medios británicos aseguran entre ayer y hoy que Michael Jackson se casó esta semana con una modelo musulmana, con el fin de lavar su imagen ante los tribunales.
Según The Sun, la nueva, tercera esposa de Jackson tiene 23 años, se llama Alisha y además de modelo es pianista de música clásica. El casamiento se habría realizado en el rancho del músico: Neverland. La ceremonia habría sido dirigida por un imán y arreglada por el grupo político y religioso Nation of Islam (Nación del Islam), movimiento musulmán cuyos seguidores reafirman los derechos de los afro americanos, y el cual ha sido vinculado a Jackson en los últimos días, comentándose incluso que el cantante se convirtió al Islam, extremo desmentido por su agente de prensa.
El lugar del casamiento luce un poco llamativo, dado que en la misma entrevista que será emitida mañana, Jackson afirma que más nunca vivirá en Neverland, al cual ya no considera su hogar luego de que la policía lo allanase violentamente el pasado 20 de noviembre.
‘Si los cargos llegan a la corte, Jackson sabe que lo ayudará tener una esposa. Muchos en los Estados Unidos creen que la boda fue puramente promocional. El problema con él es que la mayoría de la población lo considera loco y muy extraño’, publicó el diario británico.