La mansión de la familia Osbourne en Beverly Hills fue el lugar de un accidental incendio. Todo ocurrió luego de que la esposa de Ozzy, Sharon Osbourne, dejara una vela encendida durante la noche y esta explotara en un envase de vidrio haciendo que se encendiera toda su sala. Ozzy tuvo que ser atendido por un equipo médico mientras que los bomberos apagaban el fuego.
Sharon habló del incidente en una entrevista: “Todo el mundo está bien. Sólo estábamos Ozzy, los perros y yo cuando sucedió. A las 5 escuché un ruido, como si un metal hubiese caído al suelo. Pensé que había llegado nuestra empleada de limpieza y que se le habían caído sus llaves, así que no le presté atención. Unos minutos después, mis ojos comenzaron a arder y mi garganta empezó a cerrarse y pensé: algo huele raro aquí”.
Añadió: “Mi perro comenzó a ladrar. Cuando bajé, vi a toda la sala encendida. La vela había explotado y el sonido que escuché fue el del vidrio rompiéndose. Mi esposo tuvo recientemente una operación en su mano y tiene un yeso. Cuando bajó, dijo “¡Oh, fuego, fuego!” y trató de apagarlo con su mano. Luego abrió la puerta mientras yo fui a la cocina a buscar agua, y cuando se la eché al fuego, se avivó más. ¡La parte frontal de su cabello desapareció! ¡Sus cejas también! Sus mejillas están al rojo vivo. Somos dos idiotas, como Los Tres Chiflados. Todo lo que no se supone que debes hacer, como ir a la cama con velas prendidas, abrir las puertas, echar agua. Todo eso lo hicimos”.
“Los bomberos llegaron y nos regañaron. Ozzy dijo: “Ella ha estado haciendo lo mismo por 32 años! Díganle que ya, ¡no más velas””.
Recordemos que Ozzy anunció recientemente el próximo lanzamiento de un nuevo disco con su mítica banda Black Sabbath, que se llamará13.