Slash y su esposa introdujeron en un juzgado en Los Angeles, una demanda en contra de la empresa que les vendió su casa, por no tener suficiente espacio para fiestas. La demanda fue dirigida al agente Gregory Holcomb y a la empresa Sotheby’s International Realty, quienes fueron los vendedores de su casa en Hollywood.
La pareja compró la casa en el 2006 y la vendió en el 2007, debido a que para ese momento les empezó a afectar que no fuera tan grande como parecía, y además de estar en una calle con restricciones para estacionar, y por lo tanto no sirvió para hacer fiestas grandes.
Para esta demanda, la pareja está esperando recibir como mínimo un millón de dólares, además del dinero correspondiente a indemnización por daños y perjuicios. El juzgado no pudo evitar que Slash introdujera esta demanda, pero sí permitirá que la empresa Sotheby’s se defienda de la acusación.